Archivo del blog

Mostrando entradas con la etiqueta Poesía. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Poesía. Mostrar todas las entradas

sábado, septiembre 13

UN HOMENAJE

 


UN HOMENAJE

Un homenaje para mi, es un acto en el que se enaltece a una persona. Es pues realmente un honor sentirme homenajeada. Y más por personas que dedican tiempo, trabajo, arte a lo poco o mucho que yo he hecho en la vida.

Quiero agradecer esa veneración, ese respeto y honor hacia mi poesía y mi persona. No creo merecer tanto, pero sí he de decir que me estimula y alegra, porque es un reconocimiento a lo que hice con entusiasmo y amor: escribir. Y eso significa que de la lectura de mis libros han surgido amigos entrañables, personas que aprecian mi entrega a la poesía. Esas personas que eran desconocidas para mi, ahora son amigos entrañables que me agasajan, que se inspiran en lo que he hecho, como Rocío Sánchez. ¿Y qué mejor premio que su interés por mi trabajo, su arte y su amistad? 

Para mí este homenaje es como una ofrenda no de día de muertos, más bien de día y de noche de vivos. Vivos que me honran con su dedicación, comprensión y amistad. Sí, este homenaje es como una serenata de amor que desde el balcón de la distancia que nos separa, escucho y aprecio su concesión y su belleza. Desde hace años, amo México, gracias a los dueños del periódico de California: La Oferta Review, Mary Andrade y Frankling, que un día me lo presentaron desde la Oficina de Turismo de México en Michoacán. Y gracias a ellos, hoy, puedo decir que me siento muy mexicana.

Y si alguien ha apreciado mi poesía, en mi trabajo literario, está también México. Han sido Estela Codero, "Estelita", Gabriel y, ahora su amiga en común, la gran artista Rocío Sánchez, que se ha interesado e inspirado en mi libro LAS CUATRO ESTACIONES, para crear y recrear su arte desde Guanajuato. Estelita a su paso por Sopetrán, es la que comenzó esta aventura de publicaciones, surgió con la profesora,escritora y editora, Elena Ortiz Muñiz, con esos libros publicados de La niña que fui y Chavelita. Pero mucho antes que Estela y Rocío, ya estaban Juan Bosco, Silvia Huanosto, Gabriel Medrano, Raúl González, Laura Solís y José Mendoza. Paty y su esposo el poeta Rubén Ahumada, Adelfina y su esposo Servando Chávez, y años después, Carla Reyes, con la que publiqué las calaveritas literarias en Salto al Reverso... Y tanta gente querida que no terminaría de hacer una lista de nombres que son vivencias, trabajos, recuerdos inolvidables de mi México lindo… Y ahora desde estas letras yo también quiero dar las gracias a todos. Quiero homenajear una a una a cada persona y a tantas extraordinarias vivencias que me han ayudado, inspirado, y he conocido allí en México.

Pero como sería interminable el recuento la lista de agradecimientos. Me centro en lo que mis amigos dicen de este libro que se estrena ya, este mes, escojo algún párrafo de lo que ellos expresan en las introducciones y los prólogos.  

El profesor, Gabriel Medrano  dice:

…"Además de lo ya aludido, el libro lleva implícito otros aspectos que no están materialmente manifiestos, las más de cuatrocientos páginas que conforman el texto bien se pueden traducir en largos viajes que Julie ha emprendido donde ha compartido sus vivencias con  otros escritores, poetas, profesores y amigos; en horas y horas de escritura y sus posteriores correcciones;  en lecturas e indagaciones que Julie Sopetrán realizó durante mucho tiempo, no sólo el año donde cada día escribió un poema que conforman las cuatro estaciones de este sugestivo  libro; en constantes discusiones y análisis de la información; en días enteros dedicados al trabajo de escritorio para convertirlo en un excelente libro."

El profesor Raúl González añade sobre este libro:

"Las Cuatro Estaciones de Julie Sopetrán no se leen, se viven. En ellas palpita el amor y la pasión de un cuerpo amado que, palabra a palabra, revive, vibra y se eriza como si fuese la primera vez.

Y así, pasan ante nuestros ojos las cuatro estaciones con todo y sus infinitas posibilidades, se viven en la oscuridad, al cobijo de la luna, bajo el reflejo de la luz de una vela ¿qué más da? No hay una hora ni un momento determinado para dar rienda suelta a la pasión y vivir con el corazón desbocado y el alma a flor de piel.

Solo de esta forma, a besos, a impulsos, a través de las caricias que desnudan un cuerpo y las miradas que erizan la piel es posible que el poeta pueda entregarse a esa amante insaciable, dulce y amarga a la vez que es la poesía.

Solo alguien con la sensibilidad de Julie logra dejar vulnerable a lo más profundo de la expresión y doblegarla a través de susurros hasta hacerla gritar de emoción. Sí, así es el erotismo de las plumas sensibles, las que se han rendido ante el peso de la expresión para resurgir de entre las cenizas con las lenguas de fuego de la hoguera lamiendo palmo a palmo el alma y el corazón."

Y la profesora Elena Ortiz Muñiz, también expone entre otras muchas cosas interesantes:

La palabra, el verso, el ritmo, la rima; la sensibilidad, la experiencia, el oficio; la disposición para vivir, para amar, para ahondar en el misterio de la creación poética… Son los recursos que Julie Sopetrán emplea para escribir los poemas del libro. Como lo señalé al principio, se dice fácil; pero sólo así ha podido alcanzar el objetivo implícito que traza en la dedicatoria: “Porque el poeta / siempre está en deuda con su Musa”; sin duda que en LAS CUATRO ESTACIONES Julie salda esa deuda, con sinceridad y compromiso."

Carla Reyes de Salto al Reverso, también me prometió unas palabras. Así como Estelita. Sé que las están terminando de escribir...

Y no puedo dejar a un lado a Laura y José de Editorial Jitanjáfora, Morelia, Michoacán, ellos se hacen cargo de publicar este libro, el tercero de mi Poesía Reunida. Su trabajo merece mi eterno homenaje. Amigo lector, no dejes de visitar su editorial, libros cuidados, elaborados con esmero. Extraordinaria colección de prestigio y profesionalidad.

Se pueden encargar los libros  en:

EDITORIAL JITANJÁFORA
redutac@gmail.com

Muchas gracias a todos.


viernes, agosto 23

UN LIBRO DE POESÍA


UN LIBRO DE POESÍA QUE MERECE LA PENA LEER

"EL OLVIDO DE LOS DESMEMORIADOS"

DE RUBÉN AHUMADA     


Por Julie Sopetrán


Según expresa nuestro poeta en la contraportada del libro, "la desmemoria es una evasión de lo indeseable" por lo tanto un ocultamiento, una huída de la misma realidad.  Y sí, Rubén, nos hace ver a través de sus versos, que la carencia de memoria en el ser humano, es una tragedia de auténtica pobreza espiritual.
Es este un libro para leer despacio, meditando los versos, saboreando entre líneas cada aspecto, cada imagen de ese buen hacer que la memoria representa en nuestras vidas.
Rubén, es muy mexicano y además de poeta, es Ingeniero Civil y Planeación Urbana, Rehabilitación Urbana y Centros Históricos, entre otros puestos de alto nivel de los gobiernos estatales y municipales de Michoacán, Jalisco y Guanajuato, también es asesor, consultor y superintendente de obras entre otros importantes puestos que ocupa y ha desarrollado en los diferentes períodos gubernamentales. Amante de la lectura, la música y la poesía.
Me gusta mucho la edición, el papel, el aspecto, la presentación de un libro artesano, bien hecho, creado por jitanjáfora Mºrelia Editores / Red Utopía, A.C. La primera edición se creó en 2009 pero está vigente en cualquier época, ya que se trata de un libro universal predestinado a leerse en cualquier época.
Felicito cordialmente a su autor por su tesón y entrega, por su amor a la poesía y por su constancia en superarse, en crear cada día el mejor verso. Y sí, desde el prólogo hasta el índice, cada palabra es una joya. Octavio Paz diría que "sin ritmo no hay poema", Rubén tiene una forma especial de cantar y lo hace con un verso muy fluido, matizando el contenido y sublimando el mensaje. Como él mismo dice, en la página 41, su memoria es "artesanal" sin dejar de lado lo "ancestral" de lo que sigue hablando en siguientes versos...
Te invito, amigo lector a buscar esa luz  que es evocación, retentiva, mención, resumen y todas esas cosas en las que, tal vez, no habíamos pensado, porque la poesía es también río en los mares de ausencias.
La poesía es soberana porque tiene por objetivo la belleza, y lo bello,  según Platón, es "resplandor de lo verdadero".  El verso se sobrepone a lo real a través del espíritu y, ese mensaje, nos lo ofrece Rubén haciendo honor a la memoria, como tema principal en estos magníficos 71 poemas del libro, que acreditan su identidad de poeta.
Mi más sincera felicitación, desde mi pequeño espacio de poesía.
Invito a los lectores que se adentren en su blog y contacten con él para hacerse con este libro de necesaria lectura.


Termino, evocando algunos de sus versos.

Siempre te busqué

En este terco corazón baldío

Hay recuerdos guardados donde la nostalgia arde

Poblando el vacío

Aleteo de alas, murmullo de voces

Tengo los pies sin suelas, sensibles y sin reclamos

Como se despabila el viento

Memoria en jirones

mares lunas, pechos soles

Mientras sucede

El olvido es el adiós de la memoria

Quítame esa coraza que me estorba

Que no me falte tu esencia


... esperanzas

nacidas

en un mundo

que nunca

ha sido imposible.


(Versos aleatorios del libro: "El olvido de los desmemoriados" de Rubén Ahumada)



domingo, mayo 29

HOY IGUAL QUE AYER

De vez en cuando voy a intercalar entre mis pequeños reportajes dedicados a México, uno que otro poema inspirado en la gran riqueza cultural de este país, poemas de mi propia cosecha que deseo compartir con vosotros.

La sangre de los mártires revolucionarios fertilizando la tierra. 1926-7 - Fresco - 2,44 X 4,91 Universidad Autónoma de Chapingo (México)  de Diego Rivera

Envueltos en sarapes rojos
Debajo de la tierra. En la milpa
El maíz suda sangre
Y me duele, me duele el barro
Los girasoles lloran por Emilio Zapata
Por el Maestro rural Otilio Montaño
Lloran por los caídos, por los que se quieren levantar
Y no pueden. Lloran por los que no saben por qué murieron
Pero lo hicieron con honor, con rabia, buscando la justicia
Los girasoles lloran y ríen
Su sonrisa es dorada por los que renacen
Por los transfigurados
Por los que fecundan la tierra mexicana
La tierra de donde sea. De los que se inmolan.
Milpas de luchadores
Es la sonrisa dulce de lo que no ha sucedido en vano
Fertilizante humano de la parcela con sabor a sangre
A sacrificio, a entrega, a inmolación por lo ideal sagrado:
Las patrias. Yucatán. Altamira. Mayas. Iberos… tantos.
Sólo el Amor es revolucionario
Los girasoles danzan
Es el movimiento de la historia, el proceso permanente,
El cambio, las revueltas, los ciclos, las transformaciones.
Los levantamientos, la agitación, la inquietud, la conmoción,
El vaivén, el resurgir de un pasado glorioso
Meso América, los abuelos, las ganas de vivir mejor siempre
Siempre la danza de los girasoles dando la espalda al tiempo no vivido
Otilio Montaño, redactando aquel manifiesto de 1910 (Plan de Ayala)
Y ahí está envuelto en sarape rojo, abonando la tierra de México
De cualquier parte, podría ser otro nombre en mi tierra o en la tuya
Y en vez de mural podría ser capricho: Rivera, Goya, quien sabe cuántos artistas… Girasoles que danzan.
Que abren su ventana a la luz, todo es misterio, pero luz
Luz circular para los hambrientos
Y ayer como hoy: los ricos, los pobres, todos en lucha
Es la Alegoría de Chapingo entre el maíz que llora, sonríe, danza…
Flor de luz para los que no ven los pétalos
Es la revolución. Ayer como hoy. Los cuerpos enterrados
El estiércol alquímico que pisan los políticos cuando juegan al golf
Sangre que es oro. Oro que es luz. Luz que es semilla sin fin
Que germina porque la sangre, como el Amor, son revolucionarios
Hoy, igual que ayer
En la milpa. En cualquier parte.

©Julie Sopetrán

Publicado en ttp://www.lacasadeasterion.net?museo_id=114

DIOS DE LA MUERTE